La Danza en los pueblos Nativos de América era de vital importancia. Está íntimamente ligada a sus costumbres y modo de vida. Con los rituales de la danza, el rezo y el canto, veneraban la Creación, la Naturaleza y les estaban tremenda-mente agradecidos al Gran Espíritu (Dios Creador de Todas las cosas) por Todo lo Creado.
Este pensamiento raiz, hacía y hace en los pueblos nativos un acto sagrado en Todo. La vida era Sagrada y Todo al ser la misma manifestación por ende también lo es.
Para los Indios Americanos Todo conlleva la Energía Sagrada en sí misma en todo lo que les rodeaba ya sean animales, plantas, personas, montañas....
En un principio la Danza se inspiró en observar los movimientos de determinados animales. El fin era representar esos mismos movimientos para darles al danzante o los danzantes las Fuerzas, las Energías y el Poder del animal.
Una vez leí, que los Indios Americanos danzaban porque sí, sin ningún significado concreto. La verdad ni cuanto más lejos de la realidad.
El conocimiento de estos pueblos, en concreto el de los Chamanes (los que saben) eran exhaustivos siendo plenamente Conscientes de ello. Podían controlar las Energías de las lluvias, los vientos, las plagas etc, porque tenían Conocimiento precisamente de que todo eran Energías y las podían controlar. Nada se hace porque sí.
Con el Poder que adquirían imitando al animal obtenían su misma Energía y así sintonizaban para conseguir precisamente ese animal en concreto por ejemplo en rituales de caza. Si la danza imitaba movimientos del Búfalo, el danzante adquiría el Poder del Búfalo y la sintonización con este animal. El canto y el rezo junto con la danza servían de paso para ahuyentar las malas energías y malos espíritus para que no interfieran en el día de la caza en cuestión.
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Beatriz Pallés
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